El vampiro más famoso de todos los tiempos procede de Rumanía, así lo decidió Bram Stoker, que se inspiró en Vlad Tepes para darle forma a su personaje. Conocido como el Empalador por su sanguinaria afición, la ruta del conde Drácula sigue sus pasos. ¿Te atreves a acompañarnos?
Durante nuestro viaje por Rumanía disfrutamos de un tiempo estupendo, lo que no nos ayudó a imaginar esa Transilvania lúgubre y misteriosa de la obra de Stoker, pero no importa, para eso están las películas.
Y es que parte de la obra de Drácula transcurre en Transilvanía, donde, en un castillo en lo alto de una roca, vive el famoso conde.
Bram Stoker nunca estuvo en Rumanía, pero se inspiró en las supersticiones de Transilvania y en algunos aspectos de la figura de Vlad III, un príncipe valaco del S. XV, para escribir su novela publicada en 1897.
Sea como fuere, Drácula se ha convertido en un imán para el turismo y el país le saca partido, por lo que verás muchos souvenirs relacionados con el vampiro y Vlad III, especialmente en aquellos lugares relacionados con alguno de los dos.
La ruta del conde Drácula es, principalmente, seguir los pasos del príncipe valaco Vlad III, conocido como Vlad Drácula o Vlad Tepes, esto es, el Empalador. Así, aprenderás que también se le considera uno de los grandes gobernantes de Rumanía que luchó por la independencia de sus tierras. De hecho, Nicolás Ceaucescu lo declaró Héroe nacional en 1976.
Por otra parte, en nuestro blog encontrarás más información sobre Rumanía, que, esperamos, te sea de ayuda:
Índice
Un poco de historia sobre Vlad Tepes
Vlad Tepes fue un gobernante valaco que se hizo conocido por su crueldad contra sus enemigos y por sus batallas contra el Imperio otomano, que, en aquellos tiempos, buscaba conquistar el suroeste de Europa.
Hijo de Vlad II Dracul, quien era hijo ilegítimo de Mircea I, es de este de quien le viene el sobrenombre de Drácula, pues su padre era miembro de la Orden del Dragón, una orden militar que luchaba contra los enemigos de la iglesia católica, por ejemplo, los otomanos. Y es que Dracul, en rumano, significaba el dragón.
Cuando el padre de Vlad III llegó al trono de Valaquia, tuvo que demostrar su lealtad a los otomanos. Para ello, sus dos hijos pequeños, Vlad y Radu, tuvieron que quedarse en la corte del sultán Murat II, padre de Mehmet II. A mediados del S. XV, el sultán permitió a los hermanos volver a Valaquia.
Tras el asesinato de su padre y de su hermano mayor, Vlad se convirtió en pretendiente al trono y, tras invadir Valaquia apoyado por los otomanos, subió al trono.
Sin embargo, enseguida tuvo que huir. Tras estar en Turquía, se fue a Moldavia, donde residían alguno de sus familiares. Finalmente, regresó a Transilvania en busca de apoyo y, al final, recuperó el trono de Valaquia por segunda vez en 1456 con apoyo húngaro.
En 1462, fue capturado por orden del rey húngaro Matías Corvino, pues este último no quería librar una batalla con el Imperio Otomano. Tras pasar un corto periodo en Alba Iulia, estuvo recluido 14 años en Visegrad.
Finalmente, como todo se movía por intereses, Matías Corvino volvió a reconocer a Vlad tepes como príncipe de Valaquia.
Liberado, vivió una temporada en Budapest y, en 1476, fue coronado por tercera vez príncipe de Valaquia.
Sin embargo, poco le duró su último reinado, pues, a finales de 1476, murió luchando contra los turcos al sur de Bucarest.
Como ya sabrás, hay numerosas leyendas sobre Vlad Tepes que cuentan lo sanguinario y severo que era, destacando el bosque de los Empalados, donde empaló a más de 20.000 personas. Sin embargo, también se le considera un buen gobernante que luchó por la independencia de su país.
Lugares que ver en la ruta del conde Drácula
Sighisoara: su lugar de nacimiento
Nuestra ruta del conde Drácula comienza en la bonita ciudad medieval de Sighisoara, donde vivió el padre de Vlad Tepes entre 1431 y 1435, años en los que se cree nació Vlad III. Por lo tanto, se asume que Sighisoara es su lugar de nacimiento y donde pasó sus primeros años.
De hecho, uno de los edificios más conocidos de la ciudad es la casa donde residió el padre, considerada la casa natal de Vlad Tepes.
Además, aquí podrás ver una escultura de Vlad III y entrar en la torre de los Herreros, donde hay un video sobre el lado heroico del gobernante en su lucha contra los otomanos.
Independientemente de que te interese seguir los pasos de Drácula o no, esta es una ciudad que debes incluir en tu ruta por el país. Nosotros te contamos mucho más sobre ella en qué ver en Sighisoara.
Targoviste: la residencia real de Valaquia
La ciudad de Targoviște se encuentra a unos 80 km de Bucarest y fue la residencia principesca de Valaquia, siendo su capital y su centro económico, político y cultural durante muchos años.
Además, fue aquí donde Vlad Tepes lanzó un ataque nocturno sorpresa al ejercito otomano de Mehmed II en junio de 1462. Su objetivo era capturar al sultán, pero, al no conseguirlo, se fueron del lugar. Cuando el sultán entró en Targoviste con sus hombres, se encontró una ciudad vacía y un bosque con más de 23.000 empalados.
Asimismo, Vlad Tepes invitó a los boyardos de Targoviste a una cena de Pascua en 1459. Esta acabó convertida en una matanza, pues Vlad mandó empalar a los mayores y a los jóvenes los mandó a construir fortificaciones, como la de Poenari.
¿Y por qué hizo esto? porque quería vengar el asesinato de su padre y hermano, a quien le quemaron los ojos y enterraron vivo.
Corte Real de Targoviste
La principal visita en Targoviste es la Corte Real, que se encuentra en el parque Chindia. La visita es de pago y, en mayo 2024, costaba 20 RON y 10 para estudiantes y jubilados. Abre de martes a domingo de 9:00 a 18:30, siendo la última entrada a las 18:00.
La Corte Real existía ya hacia 1400, en tiempos de Mircea el Viejo, el abuelo de Vlad Tepes, aunque su desarrollo tuvo lugar durante el reinado de Vlad Dracul o Vlad Tepes, convirtiéndose en las mayores fortificaciones del país.
Por otro lado, el último periodo de apogeo de la Corte Real fue durante el reinado de Constantin Brancoveanu, pero, con el traslado de la capital a Bucarest, empezó su deterioro, quedando en ruinas a mediados del S. XVIII.
Durante tu visita, verás distintas construcciones, como las ruinas del Palacio Real, que se levantó en el S. XV, la Iglesia del Viernes Santo de mediados del S. XV o la Gran Iglesia Principesca, que llegó a ser el edifico más grande de Valaquia y cuya pintura interior data de finales del S. XVII.
Sin embargo, el edificio más conocido de todos es la torre Chindia, que es el símbolo de la ciudad y que se levantó durante el segundo reinado de Vlad Tepes a mediados del S. XV.
La torre ha tenido diversas funciones, especialmente militares, pero también ha servido como estación de bomberos o para guardar el tesoro. Eso sí, su aspecto actual viene de unas obras de restauración del S. XIX. Mide 27 metros de altura y puedes subir a ella para tener unas buenas vistas de los alrededores.
En la corte real hay, además, un pequeño museo sobre la imprenta y el libro antiguo rumano.
En una historia más reciente, Targoviște fue el lugar donde el líder comunista Nicolae Ceaușescu y su esposa fueron arrestados, juzgados, condenados y ejecutados en diciembre de 1989. Así, también puedes visitar el cuartel donde sucedieron los hechos
Bucarest: la otra corte real
Mircea el Viejo, el abuelo de Vlad Tepes, construyó una fortaleza a finales del S. XIV en Bucarest. Más tarde, en el S. XV, Vlad Tepes la mejoró y la convirtió en residencia principesca, siendo el lugar alrededor del cual se desarrolló Bucarest. Esta se conoce como la Vieja Corte y actualmente está en obras, por lo que no puedes ver nada. Habrá que esperar unos años para saber qué se puede visitar de sus ruinas.
Además, la primera mención escrita que se tiene sobre Bucarest data de 1459 y es un documento firmado por Vlad III. Este se encuentra en el museo de Historia de Bucarest.
Para saber más sobre la capital del país, te recomendamos leer qué ver en Bucarest.
Castillo de Poenari: «el verdadero castillo de Drácula»
En el S. XIII, se construyó en este lugar una fortaleza, que fue, finalmente, abandonada. Sin embargo, a mediados del S. XV, Vlad Tepes la reparó y la amplió, convirtiéndose en una de sus fortalezas principales. Por eso, a veces se refieren a él como el verdadero castillo de Drácula.
Las ruinas del castillo de Poenari se encuentran en lo alto de una montaña en la carretera Transfagarasan, a unos 25 kilómetros al norte de Curtea de Argés. Para llegar a ellas tienes que subir 1480 escalones.
Si merece la pena subir, no te lo podemos decir, porque nos la encontramos cerrada por restauración.
Castillo de Bran: el «castillo de Drácula»
Sin embargo, este lugar de la ruta del conde Drácula tiene más que ver con la novela de Bram Stoker, pues dicen que el escritor irlandés lo tomó como modelo para crear el hogar del vampiro. Sin embargo, su nombre no se menciona en la novela.
Es cierto que el castillo de Bran sí recuerda a la descripción que el escritor irlandés hace de la mansión y, aunque él nunca estuvo en Rumanía, pudo inspirarse en alguna ilustración.
Te contamos mucho más sobre esta fortaleza en visitar el castillo de Bran.
Brasov y Sibiu: Vlad III y los sajones de Transilvania
Las relaciones de Vlad Tepes con los sajones de Transilvania no fueron siempre buenas. Así, buscó su apoyo y les prometió protegerles en caso de una invasión otomana.
Sin embargo, cuando estos apoyaron a sus enemigos o rompieron los tratados comerciales, sufrieron su ira. Se estima que Vlad ejecutó a más de 60.000 personas entre 1456 y 1462, muchos de ellos por empalamiento. Además, se dice que los bosques de estas ciudades se quedaron sin árboles por este motivo.
Por otro lado, los sajones de Transilvania se vengaron de Vlad Tepes escribiendo relatos que describían su crueldad.
Independientemente de pertenecer a esta ruta del conde Drácula, tanto Brasov como Sibiu son dos de las ciudades más bonitas de Transilvania que te recomendamos visitar.
Nosotros te contamos mucho más sobre ellas en qué ver en Brasov y qué ver en Sibiu.
Medias, Alba Iulia y Castillo de Corvin: lugares donde dicen que Vlad Tepes estuvo encarcelado
Así, se dice que fue encarcelado en Alba Iulia antes de mandarlo a Visegrad. Actualmente, aquí puedes visitar la ciudadela de Alba Carolina, donde puedes recorrer sus fortificaciones y ver restos romanos.
También se cree que Vlad Tepes pasó 7 años preso en el castillo de Corvin, una de las fortalezas más bonitas de Rumanía, es decir, que merece la pena que la visites te esté interesando o no la ruta del conde Drácula.
Asimismo, creen que Vlad Tepes estuvo detenido en Medias debido a los conflictos con el rey Matías Corvino. Además, el vino de esta ciudad medieval poco conocida se menciona en la novela de Bram Stoker.
Nosotros te hablamos sobre ella en qué ver en Medias.
Monasterio de Snagov y monasterio de Comana o ¿dónde está la tumba de Vlad Tepes?
Vlad Tepes fue asesinado en 1476 durante una batalla y no se sabe realmente que pasó con su cuerpo. Se dice que los otomanos lo descuartizaron y enviaron su cabeza a Mehmed II.
Tampoco se conoce con seguridad el lugar donde está enterrado. Según la tradición, se cree que se encuentra en el monasterio de Snagov, aunque, por otro lado, se dice que pudo ser enterrado en la iglesia del monasterio de Comana, que fue fundada por Vlad III y estaba cerca del lugar de batalla donde murió.
Sea como fuere, el monasterio de Snagov es un bonito rincón que está a unos 50 kilómetros al norte de Bucarest en una isla del lago Snagov. Así, para llegar hasta él tendrás que cruzar una pasarela de madera.
Documentado en la segunda mitad del S. XIV, a mediados del S. XV, Vlad Tepes mandó construir aquí un muro defensivo, un puente, una prisión, un túnel bajo el agua y un campanario.
Sin embargo, la iglesia actual fue construida en la primera mitad del S. XVI, sufriendo diversas restauraciones con el paso del tiempo. Además, su interior fue decorado con pinturas a mediados del S. XVI, pero sólo se conservan en una zona de la iglesia, pues la mayor parte de las pinturas que decoran su interior son de 1815.
El elemento que más nos interesa en este post se encuentra en el suelo de la nave y es la lápida que, se dice, es la del Empalador. Aunque ha habido estudios arqueológicos, no se encontró nada y, por lo tanto, no es seguro que esta sea la tumba de Vlad III.
Para visitar el monasterio de Snagov, en mayo 2024 tuvimos que pagar 20 RON por persona.
Por su parte, el monasterio de Comana se encuentra a unos 35 kilómetros al sur de Bucarest y fue fundado por Vlad Tepes en 1461 como un monasterio-fortaleza. Este ha sufrido numerosas reconstrucciones a lo largo de su historia.
Bistrita y Cluj Napoca: lugares de hospedaje de Jonathan Harker
Otro de los lugares de la ruta del conde Drácula es la ciudad de Bistrita, donde, en el hotel Corona de Oro se alberga el protagonista de la novela Jonathan Harker.
Como te puedes imaginar, actualmente existe un hotel, Coroana de Aur, que fue inaugurado en 1974.
Además, a unos 50 kilómetros al noreste de Bistrita está Piatra Fantanele, el lugar donde, según la novela, se encontraba el hogar de Drácula. Aquí estaba el hotel Castel Drácula, pero ahora está cerrado.
Del mismo modo, Cluj Napoca también se menciona en la novela, pues aquí duerme Jonathan Harker su primera noche en Transilvania. El hotel en el que se aloja es el Royale y no es real.
En Cluj Napoca, la segunda ciudad más grande de Rumanía, puedes aprender también sobre la vida de un personaje relacionado con Vlad Tepes, Matías Corvino, pues aquí está la casa donde nació el rey húngaro, así como el gran monumento en su recuerdo en la plaza de la Unidad. Te contamos muchas más cosas sobre esta ciudad en qué ver en Cluj.
Mapa de la ruta del conde Drácula
- 1. Sighisoara
- 2. Targoviste
- 3. Bucarest
- 4. Castillo de Poenari
- 5. Castillo de Bran
- 6. Brasov
- 7. Sibiu
- 8. Medias
- 9. Alba Iulia
- 10. Castillo de Corvin
- 11. Monasterio de Snagov
- 12. Monasterio de Comana
- 13. Bistrita
- 14. Castel Drácula
- 15. Cluj Napoca
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¡Muy interesante! Lo que se aprende con tus posts… 😊. Ahora mismo voy a leer sobre ese castillo en el que supuestamente se inspiró Bram Stoker.