La capital de Irlanda del Norte fue uno de los centros industriales más importantes a comienzos del S. XIX. Asimismo, de aquí partió el Titanic en 1912 y hoy alberga el estudio cinematográfico donde se rodó Juego de Tronos, es decir, una de las series más éxitosas de los últimos tiempos ¿Nos acompañas a descubrir qué ver en Belfast?
Lunes, 11-Oct-2021
Hoy nos tocaba conocer Belfast, una ciudad con mucha historia que ha sabido reconvertirse a lo largo de los siglos. Por eso, además de hablarte de qué ver en Belfast, te vamos a hacer un resumen de su historia para que comprendas mejor cómo ha llegado a ser la ciudad que es hoy día.
Índice
Cómo llegar a Belfast
El aeropuerto internacional de Belfast está a menos de 30 km del centro de la ciudad y en este link encontrarás toda la información necesaria para llegar desde aquí al centro.
Y para encontrar el mejor vuelo te aconsejamos entrar en Skyscanner, que te permite ver fácilmente qué fechas sale más barato volar o qué destino es el más económico.
Otra manera de llegar es en coche de alquiler, que fue la que nosotros escogimos, pues incluimos Belfast en nuestra ruta por Irlanda e Irlanda del Norte.
Sin embargo, si no te apetece conducir, puedes unirte a una excursión organizada, como este tour a Belfast y a la Calzada del Gigante desde Dublín o a esta excursión que incluye el castillo de Dunluce.
Nosotros te hablamos de todos estos lugares en qué ver en la costa de Antrim y en visitar la calzada del gigante.
Dónde aparcar en Belfast
Como el estacionamiento en ciertas calles de Belfast es de pago de lunes a sábado de 8:00 a 18:00, nosotros decidimos dejar el coche en un parking, pues íbamos a pasar un día entero en la ciudad sin usarlo.
Además, nuestro hotel, el ETAP Belfast, ofrecía descuento para el Parking NCP Belfast Dublín RD, que está abierto 24 horas. Así, el precio que debíamos haber pagado por dos noches era de £17, pero pagamos £10,50.
Por otro lado, hay muchos parkings repartidos por la ciudad y sus precios no nos parecieron caros.
Dónde dormir en Belfast
Como ya hemos dicho, nosotros pasamos dos noches en el ETAP Belfast, que es básicamente un Ibis budget, y lo encontramos a través de Booking.
En nuestra opinión, los hoteles de esta cadena son una buena opción para pasar 1-2 noches, pues son todos muy parecidos y tienen recepción 24 h, que viene muy bien a la hora de organizar un viaje.
En este caso, el hotel estaba en el centro, en una calle con mucho ambiente, Dublin Road. Sin embargo, a nuestra habitación no llegaban ruidos.
Por otro lado, una zona que nos gustó mucho y donde nos hubiera gustado alojarnos fue el Quarter de la Catedral.
Historia de Belfast
Durante la invasión normanda del S. XII, el líder de esta zona, John de Courcy, mandó construir el castillo de Belfast en el centro de la actual ciudad. Sin embargo, a día de hoy, no queda nada de él.
A comienzos del S. XVII, el pequeño pueblo de Belfast le fue concedido a Sir Arthur Chichester, que decidió convertirla en una gran ciudad. No obstante, fue en el S. XVIII cuando Belfast empezó a prosperar como un importante centro comercial, siendo el lino una de sus principales exportaciones.
De hecho, en el S. XIX, era la ciudad industrial más importante de Irlanda, siendo el comercio del lino, la ingeniería pesada, el tabaco y la construcción de barcos las industrias dominantes.
Y es que su situación geográfica la hacía perfecta para el desarrollo de la industria naval. Así, se creó la empresa Harland and Wolff, una de las mayores constructoras de barcos del mundo, que construyó, por ejemplo, el RMS Titanic.
Además, en 1852, Belfast era ya el primer puerto de Irlanda superando a Dublín.
Por otro lado, las tensiones sectarias que había en Irlanda provocaron muchísimos disturbios entre católicos y protestantes y en 1874, el tema de la autonomía, Home Rule, se convirtió en el principal tema político. Así, el 28 de septiembre de 1912, el Pacto de Ulster, The Ulster Covenant, fue firmado en el ayuntamiento de Belfast por cerca de 500.000 personas.
Unos años más tarde, en 1920, nació Irlanda del Norte y comenzó en Belfast un periodo de gran violencia, que se correspondió con la Guerra de Independencia de Irlanda. Sin embargo, mientras que en el resto del país la guerra se libraba entre el IRA y las fuerzas de la Corona, aquí la mayor parte de las muertes fueron de civiles a civiles. Así, los enfrentamientos armados entre católicos y protestantes ocurrían frecuentemente en las calles de la ciudad. Este periodo de intensa violencia, entre 1920 y 1922, fue conocido como el Pogromo de Belfast y alcanzó su punto máximo en la primera mitad de 1922, después de que se confirmara la separación de Irlanda.
Sin embargo, en el verano de 1922, la violencia en Irlanda del Norte disminuyó rápidamente. Y es que el auge económico de la I Guerra Mundial había desaparecido y el 23% de la población estaba ahora desempleado. Por eso, hubo manifestaciones donde tanto católicos como protestantes marchaban en solidaridad protestando contra la falta de trabajo.
Por ejemplo, durante una de ellas sucedió un episodio raro de unidad. Y es que la policía cargó contra los manifestantes matando a un católico y a un protestante cerca de Shankill Road, un área tradicionalmente unionista. No obstante, la gente acudió en ayuda de los manifestantes, que eran en su mayoría católicos. Conmocionado, el Gobierno aumentó la ayuda a los desempleados, pacificando a la población.
Durante la II Guerra Mundial, Belfast fue una de las ciudades del Reino Unido más bombardeadas por los alemanes, debido a su industria aeroespacial y de construcción naval. Así, el Belfast Blitz fueron cuatro ataques aéreos sobre objetivos estratégicos en abril y mayo de 1941. Estos causaron un gran número de muertos.
En los años de la posguerra, el declive económico y las tensiones sectarias aumentaron el resentimiento entre la población católica a medida que la discriminación iba en aumento, favoreciendo la creación de la Asociación de Derechos Civiles de Irlanda del Norte, NICRA. Esta buscaba la igualdad de derechos de vivienda, derechos de voto, representación proporcional y terminar con la discriminación laboral, entre otras cosas.
Sin embargo, muchos unionistas temían que NICRA y grupos similares buscasen derrocar al gobierno de Irlanda del Norte para unirse a la República de Irlanda.
De este modo, la violencia se intensificó a principios de la década de 1970 con la formación de grupos paramilitares rivales en ambos lados y los bombardeos, asesinatos y la violencia callejera marcó la vida cotidiana a lo largo del conflicto.
Además, la crisis general de la industria manufacturera europea a principios de la década de 1980, incrementado por la violencia política, destruyó la economía de la ciudad.
Finalmente, los sacerdotes católicos Alec Reid y Gerry Reynolds decidieron intentar un proceso de paz. Como muchos de los líderes perderían el apoyo de sus electores si supieran que estaban negociando, este se llevó a cabo en secreto. Al final, las reuniones culminaron con el alto el fuego de 1994 y, más tarde, con el acuerdo de paz final: el Acuerdo de Viernes Santo de 1998.
Belfast sufrió lo peor del conflicto en Irlanda del Norte y alrededor de 1.500 personas murieron desde 1969 en adelante. Para más información sobre este tema puedes leer qué ver en Derry-Londonderry.
Desde 1998, la ciudad ha visto una importante remodelación.
Qué ver en Belfast
Una buena manera de empezar a conocer la ciudad es uniéndose a este free tour por Belfast. Sin embargo, también puedes hacer este free tour de los misterios y leyendas de Belfast, donde te contarán historias muy interesantes. Y si sois un grupo, igual os interesa este tour privado en español.
Por otro lado, la zona a visitar no es excesivamente grande, por lo que puedes llegar caminando a la mayoría de los lugares que ver en Belfast. Sin embargo, si no dispones de mucho tiempo, puedes subir al autobús turístico, que para en todos ellos.
Y sin más dilación, comencemos con los lugares que ver en Belfast, que te los vamos a ir indicando en el orden en que nosotros los visitamos.
Alrededores del ayuntamiento
La primera zona que visitamos fue la que está cerca del ayuntamiento, en Great Victorian street, donde hay varios edificios interesantes:
Crown Liquor Saloon
Este es uno de los pubs más conocidos de Belfast, que fue construido en 1826. Tanto su exterior como su interior son realmente bonitos.
Nosotros intentamos entrar, pero por la mañana estaba cerrado y por la noche estaba lleno y no nos fue posible entrar sin reserva.
Casi al lado está el Pub Robinson´s, cuya fachada exterior también tiene su encanto.
Hotel Europa
Frente al pub se encuentra este hotel de 4 estrellas que es tristemente conocido por ser el más bombardeado del mundo. Abierto en 1971, sufrió 36 ataques bomba durante el conflicto norirlandés.
Grand Opera House
Junto al hotel está el edificio de la Ópera de Belfast, que fue inaugurada en 1895 y donde han actuado grandes artistas como Charlie Chaplin, Laurel y Hardy, Orson Welles o Luciano Pavarotti. De hecho, este último hizo aquí su debut en el Reino Unido en 1963.
En la década de 1970, con el auge del conflicto, el negocio bajó mucho y se pensó en su destrucción. Finalmente, tras ser renovado, volvió a abrir en 1980.
Aparte de ver un espectáculo, puedes visitar el edificio donde hay una exhibición sobre su historia.
Scottish Provident Building
Este es un edificio impresionante que está decorado con cabezas que representan los diferentes continentes.
Ayuntamiento de Belfast
Uno de los lugares que ver en Belfast es el ayuntamiento, un edificio neobarroco de principios del S. XX.
Antes de entrar, pasea un poco por sus jardines, donde está la estatua de la Reina Victoria y hay dos memoriales del Titanic. Uno es de 1920 y en él se nombran a 22 victimas, pues entonces creían que sólo 22 personas de Irlanda del Norte habían muerto en el desastre, y el otro es el Jardín conmemorativo del Titanic, donde aparecen los nombres de las 1512 víctimas.
Cómo visitar el interior del ayuntamiento de Belfast
El interior del ayuntamiento puedes conocerlo dentro de una visita guiada en inglés, que es de pago y dura alrededor de una hora, o por libre de manera gratuita. Eso sí, en este caso verás una exposición sobre la historia de la ciudad y algunas partes del ayuntamiento, pero no tendrás acceso a algunas salas que sí se ven en el tour.
Así, si quieres hacer la visita guiada, te tienes que presentar en la recepción del ayuntamiento el día del tour, pues las plazas se otorgan por orden de llegada. Sin embargo, si quieres visitarlo por libre, puedes reservar con antelación en su página web o ir directamente y ver si puedes entrar, lo que dependerá del número de visitantes en ese momento.
Cuando nosotros fuimos, no había tours debido a la pandemia, por lo que nuestra única opción era visitarlo por libre y, aunque no habíamos reservado, no tuvimos problemas en entrar.
La exhibición nos pareció muy interesante y estaba muy bien organizada y en ella se trataban temas como el Titanic, el Home Rule, el Belfast Blitz o el conflicto norirlandés. Además, vimos alguna de las vidrieras del ayuntamiento, que conmemoran eventos históricos.
De las que vimos nos llamó la atención la que recuerda la contribución de unos 320 voluntarios irlandeses a la Guerra Civil española. Estos lucharon en el bando republicano como miembros de la XV Brigada Internacional.
El ayuntamiento domina la plaza Donegall, donde convergen muchas de las calles principales de Belfast. Además, aquí está también la Biblioteca Linen Hall, que fue fundada en 1788 y es la más antigua de la ciudad. Esta tiene colecciones muy interesantes, entre las que destaca la de Política de Irlanda del Norte. Puedes visitarla de manera gratuita y dentro hay también una cafetería.
Falls Road, Schankill Road y el Muro de la Paz
Cómo visitar una de las zonas más controvertidas que ver en Belfast
Falls Road y Schankill Road son dos barrios de diferente ideología que están separados por el muro de la Paz. Así, el primero es nacionalista y el segundo unionista, y en ellos abundan los murales políticos. Además, como te puedes imaginar, esta fue una zona que sufrió mucha violencia durante el conflicto norirlandés.
De este modo, una opción muy interesante para conocer esta área es hacer un tour por el Belfast político dentro de un taxi negro, que te lleva a los puntos de interés y te explican lo que sucedió, o este tour de 3 horas por el Belfast político, en el que te acompañan guías de ambos bandos que te explican la historia de primera mano.
Por otro lado, puedes unirte a un tour por el Belfast político a pie en español.
Sin embargo, nosotros, que viajábamos con una niña pequeña, preferimos hacer el trayecto por nuestra cuenta. Es cierto que hubo momentos en que nos sentimos un poco perdidos, ya que, en el fondo, estas paseando por calles totalmente normales y no sabes muy bien lo que estas buscando. No obstante, creemos que de esta manera puedes entender mejor como se encuentra la situación en estos momentos.
Qué ver en Falls Road
Llegamos a Falls Road después de andar una media hora desde el ayuntamiento y, al llegar a Dunville park, empezamos a ver algunos murales relacionados con la República de Irlanda y enseguida vimos las oficinas del Sinn Feinn, donde había varias placas conmemorando a víctimas de diferentes ataques.
Además, aquí está uno de los murales más famosos de esta zona, el de Bobby Sands, un miembro del IRA provisional que murió en prisión durante la huelga de hambre de 1981. Él fue el primero de diez presos republicanos en morir en huelga de hambre en busca de un estatus político.
Cerca, está el Jardín de la Remembranza, que conmemora a civiles y a miembros del Ejército Republicano Irlandés muertos durante el conflicto. Cuando lo visitamos, había un señor mayor que estaba cuidando el césped con muchísimo cariño.
Por el camino, vimos muchas casas decoradas para Halloween, que es una fiesta bastante popular en Irlanda. Y no es para menos, pues se dice que sus orígenes están en este país, cuando los celtas celebraban el Samhain para conmemorar el final del verano.
Muro de la Paz
En la calle Howard, muy cerca del Jardín de la Remembranza, cruzamos una de las secciones más conocidas del muro de la Paz, la que separa las zonas de Falls Road y Shankill Road. A la entrada, había un cartel que ponía énfasis en que las dos comunidades tenían más cosas en común que diferencias.
Así, paseamos un rato a lo largo del muro por Cupar Way y vimos que estaba lleno de grafitis y murales, algunos de los cuales eran reivindicativos, otros contaban testimonios y otros eran apolíticos.
De aquí, pusimos rumbo a Schankill road y, por el camino, vimos algunos murales. Sin embargo, lo que más nos sorprendió fue la seguridad de las casas, que estaban rodeadas por muros y vallas, y algunas hasta con con alambres.
Pero, ¿Qué es el muro de la Paz?
Pues bien, una barrera que comenzó a construirse en 1969 para intentar mitigar el gran número de disturbios. Con el tiempo, se construyeron más secciones y se mejoraron las ya existentes, incluso después del Acuerdo de Viernes Santo de 1998.
Así, en total, esta pared se extiende a lo largo de 34 km y está mayoritariamente en Belfast, aunque también hay secciones en otros lugares, como Derry y Portadown. Para su construcción se han utilizado diferentes materiales, como hierro, ladrillo o acero, y puede alcanzar una altura de hasta 8 metros.
Su objetivo es minimizar la violencia entre las dos comunidades y, aunque se ha tratado extensamente su eliminación y ha habido alguna iniciativa para su apertura, a día de hoy muchas secciones siguen en pie.
Qué ver en Schankill Road
Schankill road es una calle llena de tiendas y supermercados, vamos, una calle de un barrio cualquiera, pero con murales en cada intersección. Y, aunque algunos no tenían relación con temas políticos, la mayoría conmemoraba a víctimas o trataban el tema de la pertenencia a Reino Unido. Además, vimos varias placas que recordaban los diferentes ataques.
Por otra parte, si tomas la Schankill Parade, llegarás a un área donde hay muchos murales. Esta es, además, una zona muy interesante, pues puedes ver como muchos han cambiado de temática con el paso de los años y los más bélicos se han ido sustituyendo por otros más neutros. Y es que, al lado de cada mural, hay un cartel en el que se explica su evolución.
Además, vimos la escultura en la que se puede leer Recuerdo/Respeto/Resolución y que sustituye a un antiguo mural de Oliver Cromwell. Esta se inauguró en 2011 y forma parte del proyecto de remodelación de Schankill, cuya primera medida fue la eliminación de murales paramilitares en 2009.
Para terminar con la visita a Schankill cruzamos de nuevo el Muro de la Paz a través de unas puertas remachadas con puntas y, justo enfrente del Twin Spires complex, nos encontramos con más murales de la zona católica, donde uno de ellos recordaba el Black Lives Matter.
Quarter de la catedral
Y volvimos al bullicio del centro adentrándonos en el quarter de la Catedral, donde comenzamos a ver el gran número de murales que decoran toda la ciudad. Si te gusta ir en busca de ellos, aquí te dejamos una lista donde puedes encontrar todos los murales de Belfast.
Catedral de Santa Ana
Esta catedral no es la más impresionante que vas a ver en tu vida, pero destaca por su gran aguja de acero inoxidable, que se eleva 80 metros sobre el nivel del mar y es conocida como la aguja de la esperanza. Además, en uno de sus lados, el que da a Academy Street, hay una enorme cruz celta.
Por otra parte, el templo empezó a construirse en 1899, pero debido a los daños sufridos en la II Guerra Mundial, a los disturbios y a problemas económicos, su construcción se alargó bastante. De hecho, no fue hasta 2007 cuando se le añadió la aguja. Y es que los cimientos del edificio se hunden en el terreno fangoso sobre el que está y, por eso, no se pudo construir una torre o un campanario. Dentro, está enterrado el gran opositor al Home Rule, Lord Carson,
La visita es de pago y te dejamos la página web de la catedral para que puedas ver la información actualizada.
Por cierto, en la plaza frente a la catedral hay otro recuerdo a la guerra civil española, una escultura en recuerdo a los que se unieron a la XV Brigada Internacional para luchar contra las tropas de Franco.
Comer en el Quarter de la catedral
Este Quarter nos pareció una zona perfecta para comer o tomarse algo, ya que hay varios restaurantes y pubs con muy buena pinta y un aire alternativo que nos gustó mucho.
Así, entrando por un pasadizo, nos encontramos en el Commercial Court, un callejón estrecho y empedrado que estaba decorado con neones y un mural sobre Dalí. Allí estaba también el pub Duke of York, donde quisimos entrar, pero no aceptaban niños. Una pena, porque nos encantó su ambiente.
Sin embargo, no fue un gran problema, pues enseguida encontramos el Dirty Onion, un pub que nos llamó la atención por su estética y porque iban a celebrar un Halloween para perros. Además, el día era perfecto para comer en su terraza. La comida, el lugar y el ambiente nos gustaron mucho.
Asimismo, este pub está en el edificio más antiguo de Belfast, que data de 1680. Al menos, eso pone en una placa en su entrada. Y es que algunas de las casas más antiguas de la ciudad están en el Quarter de la Catedral.
Por cierto, si quieres conocer más locales interesantes de la ciudad, igual te interesa este tour por los pubs de Belfast.
Albert memorial Clock: el Big Ben de Belfast
De allí ya nos fuimos al Quarter del Titanic, pasando por el elegante hotel de 5 estrellas Merchant.
Por el camino, seguimos viendo murales en cada esquina y el “Big Ben” de Belfast, el Albert Memorial Clock, un reloj de 1869 que conmemora al marido de la reina Victoria, el príncipe Alberto. Este mide unos 34 m de altura y está construido en una mezcla de estilo gótico italiano y francés y, al estar en un terreno pantanoso ganado al mar, se encuentra algo inclinado.
Esta área de Queen’s Square y Custom’s House Square fue un lugar que ver en Belfast que nos gustó mucho. Así, es una zona muy amplia con árboles, donde edificios modernos de gran altura contrastan con antiguos edificios de piedra. Uno de ellos pertenece al pub Mc Hughs, cuya construcción se remonta a 1711.
Big Fish
Antes de cruzar el puente que atraviesa el rio Lagan, párate a ver la curiosa escultura de un pez hecho con pequeños fragmentos de la historia de Belfast. Se llama Big fish, mide 3 m de largo y se construyó en 1999 usando baldosines decorados con episodios de la ciudad.
Quarter del Titanic
Justo al lado del puente Lagan, encontramos la primera vidriera de las 6 que forman el camino Glass of Thrones, que representan escenas emblemáticas de la serie y están a lo largo de la milla marítima. Y es que estamos en la ciudad que alberga el estudio donde se rodó esta mítica serie.
Aparte, la evolución del Quarter del Titanic es asombrosa y su desarrollo aún no ha terminado. De hecho, hay un plan de remodelación que dura hasta 2030 y es uno de los proyectos de regeneración del litoral urbano más grandes de Europa. Así, a día de hoy, este es uno de los lugares que ver en Belfast que no puedes perderte.
Qué ver en el Quarter del Titanic
Nosotros fuimos paseando a lo largo del río viendo las vistas a la otra orilla, donde había edificios modernos de grandes ventanales. Y, por fin, vimos el sorprendente edificio del museo Titanic Belfast, que recuerda la proa de una embarcación. Si el barrio ya nos recordaba a Bilbao con su pasado industrial y su increíble reconversión, este edificio nos recordó al Guggenheim.
Así, el museo se encuentra en los antiguos astilleros de Harland and Wolff, donde se construyó el famoso transatlántico. Además, está revestido de aluminio plateado y mide lo mismo que el casco del Titanic, 38,5 m.
Asimismo, cerca del museo es fácil distinguir las dos grúas amarillas de Harland and Wolff, que, a día de hoy, forman parte del skyline de Belfast. Estas comenzaron a usarse en 1969, miden más de 90 m de altura y son conocidas como David y Goliath por su gran fuerza, ya que pueden levantar más de 840 toneladas.
Por otro lado, frente al museo está el barco SS Nomadic, cuya visita está incluida con la entrada al museo. Y es que esta embarcación de vapor es la única sobreviviente de la compañía White Star Line. Así, fue botado en 1911 en Belfast y servía de transbordador para los transatlánticos RMS Olympic y RMS Titanic, que eran demasiado grandes para atracar en ciertos puertos. Más tarde, fue usado durante la I y la II Guerra Mundial y, tras servir como restaurante en el Sena, regresó a Belfast en 2006.
Cómo visitar el museo Titanic, uno de los lugares que ver en Belfast
Si vas a visitar el Titanic Belfast, cuenta con dedicarle, al menos, 2 horas. Además, su parte más llamativa, un paseo en un contenedor donde un trabajador de la época te va contando como fue la construcción del barco, cierra antes. Así, lo mejor es que entres en su página web, donde está toda la información actualizada sobre la visita. Además, la última admisión es siempre 1 hora 40 min antes del cierre y lo mejor es que reserves tu entrada con antelación.
Por otro lado, si te está gustando el post, puedes comprar desde aquí las entradas al museo del Titanic. De este modo, nos estarás ayudando a seguir creando contenido. Gracias!
Como ya hemos dicho, entrar en el SS Nomadic está incluido, pero cuidado, porque cierra antes que el museo.
A nosotros el museo nos gustó mucho, pues está muy bien diseñado y la visita es muy amena. Durante esta, te hablan de Belfast en la época del famoso transatlántico y sobre su construcción y cómo era por dentro. Así, hay réplicas de varias partes del Titanic, por lo que te sientes como un pasajero más. Además, explican el accidente, hablan de los pasajeros y también de la exploración submarina de los restos, que nos pareció muy interesante. En conclusión, un museo diferente que te recomendamos visitar.
Por cierto, antes o después de visitar el museo, te aconsejamos que hagas una pausa en the Dock café, una cafetería con una filosofía muy curiosa. Así, aquí uno paga lo que crea conveniente e, incluso, te dejan llevar comida de fuera. Además, tienen un pequeño jardín de la oración y exponen obras de artistas locales . Como puedes ver, un lugar muy curioso que ver en Belfast.
Alrededores del museo Titanic Belfast
En la parte trasera del museo están las gradas, donde te haces una idea de lo grande que era el barco, pues su silueta está dibujada en el suelo.
Además, aquí están los Titanic studios, uno de los estudios cinematográficos más grandes de Europa, que han sido escogidos por productores como HBO y Universal. Así, son conocidos por ser el principal estudio de la producción de la serie Juego de Tronos.
Sin embargo, si quieres visitar los estudios de Juego de Tronos, tienes que ir a Banbridge, que está a unos 40 km de Belfast. Y si no te quieres preocupar por el traslado, puedes unirte a esta excursión a los estudios de Juego de Tronos.
Si sigues caminando por el Titanic walkway, llegarás a la Gran Luz, que son unas lentes que sirvieron a dos faros durante unos 127 años. Ahora están instaladas en una nueva estructura en el Titanic Quarter, que está diseñada para durar 100 años.
Además, muy cerca está el HMS Caroline, un barco que sirvió en las dos Guerras Mundiales, siendo el único que sobrevivió a la batalla naval de Jutland, es decir, la mayor batalla naval de la I Guerra mundial, donde se enfrentaron la flota británica contra la alemana. Actualmente es un museo y puedes reservar los tickets con antelación en esta página.
Los diques secos
Si sigues caminando, llegas al muelle del Titanic y a la casa de bombas, que puedes visitar. Este era originalmente conocido como el dique seco Thompson.
Y es que en este Quarter se han conservado tres diques secos construidos entre 1860 y 1910. Estos son cuencas cerradas que se pueden llenar de agua para que los barcos floten y luego drenarlos para que descansen en él y así poder realizar el mantenimiento.
Así, el más antiguo es el Hamilton dry dock, que estuvo en funcionamiento hasta la década de 1990. Allí se colocó, se restauró y se mantiene el SS Nomadic. Al quedarse pequeño, se construyó el dique seco Alexandra, que fue inaugurado en 1889 y ahora alberga HMS Caroline.
Por último, el dique seco Thompson fue inaugurado en 1911 y estuvo en funcionamiento hasta 2002. Este se utilizaba para los enormes transatlánticos, siendo el más famoso de todos los que aquí estuvieron el Titanic. Tras su lanzamiento desde las gradas en mayo de 1911, el Titanic fue enviado al dique seco para equiparlo antes de partir de Belfast en abril de 1912.
The Entries, un lugar que ver en Belfast
Te recomendamos recorrerlos todos, pero no te preocupes, pues están muy cerca unos de otros. A nosotros fue uno de los lugares que ver en Belfast que más nos gustó y nos parecieron perfectos para hacer una pausa y tomarse algo.
Así, algunos de los entries son, el Winecellar Entry, cuya decoración nos gustó particularmente y alberga el pub White´s Tavern, que, fundado en 1630, está considerado como el más antiguo de Belfast, el Crown Entry, el Wilson´s Court, el Joy´s Entry, el Pottinger´s Entry, el Castle Arcade, que hace referencia al lugar donde estaba el castillo de Belfast, el Sugar House Entry y el Cole´s Alley.
Cerca, está Victoria Square, donde hay un edificio que nos recordó al Flatiron de Nueva York y donde está el Bittles bar, un pub donde puedes hacer una pausa.
Además, enfrente tiene una fuente muy curiosa en recuerdo de Daniel Joseph Jaffe, un comerciante alemán que llegó a Belfast a mediados del S. XIX para abrir un negocio de exportación de lino. Este es considerado el fundador de la comunidad judía en la ciudad y construyó la primera sinagoga.
Aquí está también el centro comercial Victoria Square, que, según leímos, tiene vistas panorámicas a la ciudad desde su cúpula. Sin embargo, no creemos que sean muy sorprendentes.
Mercado de San Jorge
Desde Victoria Square enseguida llegamos a la zona de los juzgados y después al mercado de San Jorge, que está en un bonito edificio victoriano de ladrillo rojo, pero que sólo abre de viernes a domingo. Si tienes la suerte de encontrarlo abierto, podrás comprar productos locales y sentarte a comer algo.
Serían las 19:30 cuando dimos por concluida nuestra visita a la ciudad. Fue entonces cuando nos pusimos a buscar un lugar donde cenar. Así, nuestra idea era tomar una cerveza en el Crown pub, pero estaba lleno y no teníamos reserva. El pub de al lado, el Robison´s, también lo estaba, así como alguno más que encontramos.
Al final, tras encontrar muchos restaurantes cerrados, acabamos en el Habana Bank Square, donde comimos de maravilla. Sin embargo, este ya no existe y ahora es el Bank Square, que, por lo que hemos visto, tiene muy buenas valoraciones.
Por cierto, muy cerca de este restaurante está el pub Kelly´s cellar y el Mourne Seafood bar, por si te apetece comer pescado o marisco.
Otros lugares que ver en Belfast
Si te quedas algo más de tiempo, puedes incluir en tu visita alguno de estos lugares que ver en Belfast.
Quarter de la Universidad
Esta área se encuentra a unos 20 minutos andando del centro de Belfast y allí está el museo del Ulster, el jardín botánico y la propia Queen´s University, que está en un bonito edificio de ladrillo rojo de mediados del S. XIX y es la más prestigiosa de Irlanda del Norte.
Nosotros decidimos no ir, porque era lunes, el día que cierra el museo.
Castillo de Belfast
Bonito edificio en Cave Hill, a unos 7 km de la ciudad y donde hay un restaurante y una cafetería.
Página web del castillo de Belfast
Stormont
El edificio del parlamento de Belfast está a unos 8 km de la ciudad. Se construyó en el S. XX y se puede visitar.
Cárcel de Crumlin Road
Esta antigua prisión, la única que queda en Irlanda del Norte de la época victoriana, puede visitarse para escuchar las historias que guardan sus paredes. Visita a la Crumlin Road Gaol experience.
Sin embargo, si estás cansado de ver edificios y visitar museos, siempre puedes participar en un tour gastronómico por la ciudad. Además, desde Belfast se organizan tours para conocer sus bonitos alrededores:
– Excursión a la Calzada del Gigante.
– Tour de Juego de Tronos y la Calzada del Gigante.
Mapa con los lugares que ver en Belfast
- 1. Crown pub, Hotel Europa y Ópera
- 2. Ayuntamiento de Belfast
- 3. Biblioteca Linen Hall
- 4. Falls Road
- 5. Muro de la Paz
- 6. Shankill Road
- 7. Catedral de Santa Ana
- 8. Torre del reloj memorial Alberto
- 9. The Big Fish
- 10. Titanic Belfast
- 11. SS Nomadic
- 12. Grúas Sansón y Goliath
- 13. Titanic Studios
- 14. The Great Light
- 15. HMS Caroline
- 16. The Entries
- 17. Universidad
- 18. Museo del Ulster
- 19. Jardín botánico
- 20. Prisión de Crumlin Road
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Belfast es una ciudad muy interesante. Seguro que si la visitamos en unos años ha cambiado mucho.